* Predicadores de Creciendo en Gracia fueron expulsados de Renaciendo TEGUCIGALPA.- Los seguidores de la secta "Jesucristo hombre o Dios hecho carne" intentan seducir a jóvenes miembros de pandillas incitándolos a matar y a marcarse con el "666".
Miembros de la secta han estado en diferentes zonas ocupadas por las pandillas "18" y la Mara Salvatrucha para tratar de inducirlos, según informes obtenidos por LA TRIBUNA.
La congregación Creciendo en Gracia reconoció que está adoctrinando a los jóvenes integrantes de maras y pandillas y que está trabajando con la población penitenciaria del país, pero que no son satánicos, porque no adoran a los muertos. 
Los jóvenes de Renaciendo rechazaron la presencia del "Anticristo"."Nuestro trabajo en sí, es educar a los creyentes para hacerlos aptos para todas las buenas obras, estamos en sesiones, albergamos cualquier tipo de personas con problemas físico-mentales, o lo que sea", indicó Héctor Fonseca, representante de Creciendo en Gracia en Honduras.
"Tenemos testimonio de la recuperación de muchas personas y de hecho estamos pronto a presentar un proyecto masivo para llevarlo a las prisiones y para poder fomentar una cultura nueva en todos los estratos de la sociedad".
"Estamos trabajando con los centros penales nacionales, aunque ahora por causa de la marcha que se dio en días atrás nos han cerrado temporalmente el espacio para algunas prisiones", lamentó Fonseca. El entrevistado pidió una oportunidad de la opinión pública en reformar la mente de los mareros "y a cualquier tipo de persona, ya sean bolos o prostitutas a lo que la sociedad le llama desecho humano". 
Creciendo en Gracia tiene unos 5,000 seguidores en Honduras.
Al preguntársele por qué les han imposibilitado la entrada en los reclusorios, el representante de esta secta contestó que fue específicamente en La Ceiba, por la causa del 666, lo cual -a su juicio- no representa ninguna justificación, porque no le hacen daño a nadie y simplemente le estaban llevando una comida, un pacto que es para el espíritu de los jóvenes y adultos.
TAMBIEN EN RENACIENDO Al centro de rehabilitación de menores infractores Renaciendo, ubicado en Támara, Francisco Morazán, estuvieron llegando los miembros de Creciendo en Gracia, pero fueron expulsados por el mensaje demoníaco que llevaron.
Jaime Romero, subdirector de Renaciendo, confirmó que los miembros de esa secta, dirigida por el puertorriqueño José Luis Jesús Miranda, quien se considera "Jesucristo hombre", estuvieron llegando a ese lugar a supuestamente evangelizar, pero los muchachos al darse cuenta que eran adoradores del satanismo no los siguieron atendiendo y los echaron de ese establecimiento. Un informe sobre la situación de los centros penales de Honduras, elaborado por Xibalba Arte y Cultura, reveló que los Jóvenes internos de Renaciendo estaban en peligro de caer en las garras de los Anticristo, porque un grupo de ellos los estaba seduciendo con sus doctrinas. La investigación realizada por Jon Horne Carter, María Isabel Barahona Morales e Itsmania Pineda Platero, miembros de la organización Xibalba Arte y Cultura, detectó que algunas iglesias cristianas que estaban evangelizando a los menores de Renaciendo, los habían abandonado y que aprovechando esta situación los únicos que los estaban visitando eran los miembros de Creciendo en Gracia. Los seguidores de Miranda, quien se considera "Dios hecho carne o Jesucristo hecho hombre", estaban enseñando eso a los infantes infractores y además les decían que es bueno matar, al tiempo que los querían tatuar con el número del bestia "666", según revelaron ellos mismos a LA TRIBUNA. 
Los seguidores del anticristo se marcan el 666.El subdirector de Renaciendo, Jaime Romero, corroboró que en efecto esta secta estuvo visitando los fines de semana a los jóvenes internos, pero no prosperó su plan de adoctrinarlos, porque la mayoría ya estaban evangelizados por la iglesia Orphan Helpers que en el país se les conoce como Ministerio Cristiano Manos Extendidas.
Este Ministerio Cristiano ha rescatado a varios jóvenes y los ha evangelizado, por lo que estos supieron resistir y contradecir las exposiciones de los denominados seguidores de Jesucristo hecho hombre.  Jaime Romero.
Renaciendo es un centro de rehabilitación manejado por el IHNFA, de viejas edificaciones de bloque que han sido modificadas para readecuarlas como hogares provisionales para los jóvenes que infringen la ley.
Los jóvenes infractores, de acuerdo a convenios internacionales, no deben ser tratados como delincuentes ni como adultos, ni ser recluidos en cárceles, por lo que sus internados más que celdas deben parecer hogares y deben recibir un trato especial aunque sean violentos.
De acuerdo a Romero, los trabajadores sociales y los psicólogos, tratan de hacer un estudio del entorno familiar y personal del joven internado para tratar con ellos y poderlos reinsertar a la sociedad, lastimosamente algunos parientes no siguen las indicaciones y los muchachos vuelven a violar la ley o son absorbidos por las malas compañías.
Manifestó que algunas organizaciones religiosas como Orphan Helpers tratan de ayudarles en la formación espiritual, pero reconoció que falta más presencia de las iglesias en los centros de rehabilitación de menores, especialmente de la tendencia cristiana evangélica y católica.
Con el llamado de atención que hizo la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos a las autoridades del IHNFA mejoró la situación de las instalaciones de Renaciendo, pero falta más ayuda.
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