HONDURAS | 23 de mayo del 2007 | ULTIMA ACTUALIZACION 5:25 pm (23:25 GMT) | |||
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Washington. Impunidad, asesinatos de mujeres y niños y resurgimiento de los escuadrones de la muerte son algunas de las violaciones más flagrantes de los derechos humanos que aquejan a Guatemala, Honduras y El Salvador, integrantes del denominado Triángulo Norte centroamericano, según el último informe de Amnistía Internacional.
Al menos 580 mujeres perdieron la vida en situaciones violentas en Guatemala en 2006, y según la Fiscalía General, sólo seis personas fueron condenadas por estos asesinatos, que en muchos casos implicaron violencia sexual. En El Salvador, las estadísticas hablan de 286 homicidios de mujeres en los primeros ocho meses del pasado año, y 150 en Honduras.
Honduras también se asoma a este informe por la muerte violenta de más de 400 niños, niñas y jóvenes, con la particularidad de que \\\\\\\\\\\\\\\"en la mayoría de los casos no se puso a disposición de la justicia a las personas responsables\\\\\\\\\\\\\\\".
Aministía dice que la impunidad es una de las lacras que viven estos países, aquejados por niveles de violencia y muerte que los alzan a las primeros puestos de las listas internacionales.
En El Salvador, Amnistía alerta sobre la \\\\\\\\\\\\\\\"creciente preocupación\\\\\\\\\\\\\\\" por la \\\\\\\\\\\\\\\"posible reaparición de escuadrones de la muerte\\\\\\\\\\\\\\\", tristemente célebres durante el conflicto armado interno de 1980-91.
Esta suposición se basa en el asesinato de dos personas -Francisco Antonio Manzanares y Juana Monjarás- en julio del año pasado tras recibir amenazas de muerte, según su hija Marina, locutora de radio y miembro de la ex guerrilla Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional.
Se da la circunstancia de que el hijo de éstos y hermano de Marina, Francisco, había muerto de forma violenta en 1996.
\\\\\\\\\\\\\\\"Al concluir el año, ninguna persona había comparecido ante la justicia por estos asesinatos\\\\\\\\\\\\\\\", señala el informe.
En los tres países, los defensores de los derechos humanos denuncian las crecientes amenazas, intimidaciones y el hostigamiento de que son víctimas.
Uno de los casos más dramáticos es el de Guatemala. Según el informe, \\\\\\\\\\\\\\\"más de la mitad de los 278 ataques de los que se tuvo noticia contra activistas y organizaciones de derechos humanos se dirigieron contra personas que centraban sus actividades en los derechos económicos, sociales y culturales, incluidos los derechos laborales, los derechos de los pueblos indígenas y el derecho a la vivienda\\\\\\\\\\\\\\\".
En Guatemala también se ha rechazado una propuesta de abolir la pena de muerte, aunque avanzaron en el Congreso dos nuevas propuestas para establecer un sistema que permita la tramitación de los indultos a personas condenadas a muerte, según el informe.
Veintiuna personas estaban condenadas a la pena capital en este país el pasado año.
Al menos 580 mujeres perdieron la vida en situaciones violentas en Guatemala en 2006, y según la Fiscalía General, sólo seis personas fueron condenadas por estos asesinatos, que en muchos casos implicaron violencia sexual. En El Salvador, las estadísticas hablan de 286 homicidios de mujeres en los primeros ocho meses del pasado año, y 150 en Honduras.
Honduras también se asoma a este informe por la muerte violenta de más de 400 niños, niñas y jóvenes, con la particularidad de que \\\\\\\\\\\\\\\"en la mayoría de los casos no se puso a disposición de la justicia a las personas responsables\\\\\\\\\\\\\\\".
Aministía dice que la impunidad es una de las lacras que viven estos países, aquejados por niveles de violencia y muerte que los alzan a las primeros puestos de las listas internacionales.
En El Salvador, Amnistía alerta sobre la \\\\\\\\\\\\\\\"creciente preocupación\\\\\\\\\\\\\\\" por la \\\\\\\\\\\\\\\"posible reaparición de escuadrones de la muerte\\\\\\\\\\\\\\\", tristemente célebres durante el conflicto armado interno de 1980-91.
Esta suposición se basa en el asesinato de dos personas -Francisco Antonio Manzanares y Juana Monjarás- en julio del año pasado tras recibir amenazas de muerte, según su hija Marina, locutora de radio y miembro de la ex guerrilla Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional.
Se da la circunstancia de que el hijo de éstos y hermano de Marina, Francisco, había muerto de forma violenta en 1996.
\\\\\\\\\\\\\\\"Al concluir el año, ninguna persona había comparecido ante la justicia por estos asesinatos\\\\\\\\\\\\\\\", señala el informe.
En los tres países, los defensores de los derechos humanos denuncian las crecientes amenazas, intimidaciones y el hostigamiento de que son víctimas.
Uno de los casos más dramáticos es el de Guatemala. Según el informe, \\\\\\\\\\\\\\\"más de la mitad de los 278 ataques de los que se tuvo noticia contra activistas y organizaciones de derechos humanos se dirigieron contra personas que centraban sus actividades en los derechos económicos, sociales y culturales, incluidos los derechos laborales, los derechos de los pueblos indígenas y el derecho a la vivienda\\\\\\\\\\\\\\\".
En Guatemala también se ha rechazado una propuesta de abolir la pena de muerte, aunque avanzaron en el Congreso dos nuevas propuestas para establecer un sistema que permita la tramitación de los indultos a personas condenadas a muerte, según el informe.
Veintiuna personas estaban condenadas a la pena capital en este país el pasado año.
